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Fecha
31 Mayo 2018

La economía española mantiene su ritmo de avance en el primer trimestre, con una tasa del 0,7% trimestral

El sector de la construcción afianza su recuperación

La economía española ha estabilizado su ritmo de avance en el primer trimestre de 2018, con un aumento trimestral del 0,7%. En tasa interanual, el PIB modera levemente su ritmo de crecimiento hasta el 3,0% mientras que el empleo avanza un 2,6%, marcando una tendencia de leve desaceleración.

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Del análisis más detallado de este dato del PIB del primer trimestre, CEOE señala:

 

  • La demanda interna disminuye su aportación al crecimiento del PIB hasta los 2,8 puntos porcentuales, cuatro décimas menos que el trimestre anterior, mientras que el sector exterior aporta dos décimas al crecimiento, frente a la contribución levemente negativa del trimestre anterior. Por tanto, la composición del PIB es más equilibrada.

 

  • Dentro de la demanda interna destaca la caída de la inversión en equipo en tasa trimestral del -1,6%, lo que supone una notable moderación del ritmo de crecimiento interanual hasta el 2,2% (7,7% en el anterior trimestre). Todavía es pronto para deducir si se va a producir un cambio de tendencia en este componente del PIB, pero es cierto que el escenario de incertidumbre política nacional e internacional no contribuye a la mejora de la inversión empresarial.

 

  • Por el contrario, la inversión en construcción sigue mostrando un crecimiento muy robusto (4,7% interanual), con un notable repunte trimestral a comienzos de año y en el que sobresale la fortaleza del segmento de vivienda.

 

  • En lo que respecta al consumo de los hogares, éste repunta en el primer trimestre, con un avance del 0,7% en tasa trimestral y un crecimiento interanual del 2,8%, la mayor desde el segundo trimestre de 2016. Por su parte, el consumo público se desacelera medio punto porcentual hasta el 1,9% interanual, por lo que se detiene la tendencia ascendente mostrada en 2017.

 

  • En cuanto a la demanda exterior, se observa una desaceleración en términos interanuales tanto de las exportaciones como de las importaciones, si bien, la mayor moderación de éstas últimas hace que la aportación al crecimiento se torne positiva (0,2 puntos porcentuales). En el caso de las exportaciones, ha sido el componente de bienes el que ha mostrado una mayor pérdida de vigor, mientras que los servicios han mostrado un notable dinamismo. Por su parte, las importaciones han mostrado un comportamiento similar, con una mayor desaceleración de su componente de bienes.

 

  • Por el lado de la oferta, destaca la consolidación de la recuperación del sector construcción, que incrementa su tasa de crecimiento hasta el 6,0% interanual, tras un crecimiento trimestral elevado, y la estabilidad del sector servicios en tasas del 2,5%. En cambio, ha sorprendido el freno de la actividad del sector manufacturero, cuya tasa trimestral se sitúa en el -1%, frenando la tendencia positiva de los últimos años. De este modo, su tasa interanual alcanza un 2,9%, frente al 4,7% del trimestre anterior.

 

  • En línea con la EPA, la economía española modera el ritmo de creación de empleo, con una tasa interanual del 2,6%, tres décimas menos que el último trimestre de 2017. Esto supone un incremento neto de 466.000 puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo en el último año. Mientras, la productividad por trabajador aumenta hasta el 0,3%.

 

  • El deflactor del PIB continúa la senda de gradual aceleración mostrada durante todo el año y se sitúa en el 1,3%, una décima superior al del trimestre anterior.

 

En definitiva, la economía española vuelve a registrar un crecimiento elevado a comienzos de 2018, si bien se advierten ciertas señales de desaceleración en el componente de inversión en bienes de equipo, en la actividad manufacturera y en los flujos comerciales con el exterior. No cabe duda de que el entorno de incertidumbre nacional e internacional, donde los riesgos son crecientes, no favorece al dinamismo de estas variables económicas.

Por otra parte, cabe destacar el comportamiento del sector de la construcción, que afianza su recuperación, sobre todo en lo referente a vivienda, y el dinamismo del consumo de los hogares, tanto de bienes como de servicios.