Pasar al contenido principal
Fecha
31 Ene 2019

CEOE destaca que la economía creció un 2,5% en 2018

El incremento del gasto público permite a la economía española acelerar su ritmo de avance en el cuarto trimestre hasta el 0,7% intertrimestral.

La economía española vuelve a registrar un crecimiento elevado en 2018, superior a los de sus socios comunitarios, pero con una senda de suave desaceleración a lo largo del ejercicio, ha señalado CEOE tras conocer el dato del PIB. No obstante, en el conjunto del año, el crecimiento ha sido menos equilibrado que en años anteriores, ya que la aportación del sector exterior ha sido negativa debido a la desaceleración de las exportaciones, añade la organización empresarial.

media-file-4265-epa.jpg

En su valoración del PIB (Producto Interior Bruto), CEOE destaca el comportamiento de la inversión tanto en equipo como en construcción, aunque el incremento de la incertidumbre y el aumento de los costes para las empresas están suponiendo un freno en las decisiones de inversión. Además, el contexto internacional previsto para 2019 no sustentará un elevado avance de nuestras exportaciones.

En concreto, la economía española ha registrado cierta aceleración en el cuarto trimestre de 2018, con un aumento trimestral del 0,7%. En tasa interanual, el ritmo de crecimiento se mantiene en el 2,4% y el empleo avanza un 2,6%, una décima más que en el tercer trimestre.

En el conjunto de 2018, el aumento del PIB y del empleo se sitúan en el 2,6% y 2,5%, respectivamente, mostrando una desaceleración con respecto a los registros de 2017, aunque todavía puede calificarse como positivo. A lo largo del ejercicio, se observa una gradual pérdida de dinamismo de la actividad, que se ha debido principalmente a una aportación más negativa del sector exterior. Con todo, estos resultados han permitido continuar con la corrección de los desequilibrios de la economía.

CEOE destaca que esta favorable evolución durante 2018 todavía ha estado sostenida por unas condiciones financieras expansivas, la recuperación de la construcción y el notable incremento del empleo. Sin embargo, también se observa un agotamiento de otros factores de impulso como el dinamismo de las exportaciones.

Según CEOE, del análisis más detallado del dato del PIB del cuarto trimestre cabe señalar:

 

  • La demanda interna reduce su aportación al crecimiento del PIB una décima hasta los 2,7 puntos porcentuales, mientras que el sector exterior mejora ligeramente y resta -0,3 p.p., una décima menos que en el tercer trimestre.

 

  • En términos trimestrales, se observa una desaceleración de todos los componentes de la demanda interna, excepto en el gasto público, que se acelera casi un punto porcentual hasta el 3,0% interanual, la tasa más elevada desde finales de 2009. De hecho, una tercera parte del crecimiento del PIB trimestral vendría explicado por el aumento del gasto público.

 

  • También destaca la pérdida de dinamismo de la inversión en equipo, que registra una tasa del 4,8% interanual, 2,2 puntos inferior a la mostrada en el trimestre anterior. También la inversión en construcción, aunque en menor medida, modera su ritmo de avance (4,8%), siete décimas menos que en el tercer trimestre. La pérdida de confianza, el deterioro de las expectativas y el incremento de los costes para las empresas estarían detrás de esta desaceleración.

 

  • En lo que respecta al consumo de los hogares, se desacelera en términos trimestrales hasta el 0,5% y registra un crecimiento interanual del 2,2%.

 

  • La nota más positiva del cuadro macro vendría por la parte del sector exterior, donde tanto las exportaciones como las importaciones se aceleran significativamente, permitiendo que la aportación de la demanda externa reste menos al crecimiento (-0,3 p.p.). No obstante, esta mejora de las exportaciones será difícilmente sostenible en un entorno de incertidumbre y desaceleración económica a nivel global y por la pérdida de competitividad que supone el incremento de costes para las empresas.

 

  • Por el lado de la oferta, destaca la pérdida de impulso de la actividad industrial, tanto de la industria manufacturera como de la energía, que se sitúa en negativo en términos interanuales (-1,1% para el conjunto de la industria) y acumulados dos trimestres consecutivos de caída intertrimestral.

 

  • Por su parte, el sector construcción, continúa mostrando un elevado dinamismo, aunque se desacelera ligeramente hasta el 6,3% interanual. También los servicios muestran un notable avance (2,9%), destacando el elevado crecimiento que mantienen las Actividades profesionales y de Información y comunicaciones y el repunte de las Actividades financieras y de seguros.

 

  • La economía española acelera una décima la creación de empleo, con una tasa interanual del 2,6%. Esto supone un incremento neto de 463.000 puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo en el último año. Mientras, la productividad por trabajador cae hasta el -0,2% y la productividad por hora trabajada hasta el -0,6%.

 

  • La remuneración por asalariado intensifica su ritmo de crecimiento en cuatro décimas hasta el 1,5% y el coste laboral unitario (CLU) repunta hasta el 1,6%.

 

  • El deflactor del PIB, que ha mostrado tasas muy moderadas a lo largo del año 2018, en torno al 1%, en el cuarto trimestre se desaceleró hasta el 0,8%.